Hablamos del Toyota Prius, un vehículo que empezó su producción en serie en el año de 1997, equipado con una propulsión eléctrica que, en conjunto con un motor de gasolina, mejora las condiciones de funcionamiento y rendimiento del vehículo. En determinadas circunstancias, el automóvil cobra autonomía y no consume combustible, anulando casi en su totalidad ruido de su tren motriz.
El sistema de carga del motor eléctrico aprovecha el dinamismo del auto para evitar ser enchufado de forma externa. Esta autonomía y autosuficiencia del Hybrid Synergy Drive, como se le conoce a esta tecnología, le otorgó gran aceptación entre los usuarios. Además, la dependencia del motor de gasolina es nula en lapsos que no requieren gran fuerza y sus bajas emisiones lo ubican entre los más amigables con el medio ambiente.
Al día de hoy, Toyota ha implementado el sistema híbrido del Prius en gran parte de sus modelos, por lo que unos 11 millones de conductores alrededor del mundo pueden disfrutarla. Este hecho ha merecido una celebración, puesto que 20 años de liderazgo en el sector son muy significativos.